[DECLARACIÓN] IMA denuncia las deportaciones de Trump a Libia y a otros países en guerra
La Alianza Internacional de Migrantes condena enérgicamente la última medida de Donald Trump de deportar de forma apresurada e injusta a migrantes, sin importar su origen, a Libia y otros países devastados por la guerra. Estas deportaciones no solo son inhumanas; son actos deliberados de represión destinados a aislar a los migrantes, negarles el debido proceso y bloquear su acceso a redes de apoyo y protecciones legales.
Al deportar migrantes a terceros países inseguros como Libia, a pesar de las advertencias del Departamento de Estado de EE. UU. sobre las condiciones de detención “mortales”, la administración Trump está poniendo deliberadamente en peligro a miles de personas. Estas acciones están diseñadas para despojar a los migrantes de su capacidad de solicitar asilo, acceder a asistencia legal, o de organizarse y luchar por sus derechos. Una vez fuera de las fronteras estadounidenses, especialmente en países sin protecciones institucionales ni infraestructura humanitaria, los migrantes se vuelven más fáciles de silenciar, desaparecer o detener indefinidamente.
Esto viola directamente el derecho internacional, incluido el principio de no devolución (non-refoulement), que prohíbe devolver a personas a países donde puedan sufrir persecución, tortura o muerte. Pero más allá de las violaciones legales, se trata de una estrategia política: al deportar a terceros países, el gobierno de EE. UU. busca reprimir la resistencia migrante, eludir la rendición de cuentas y erosionar la solidaridad global con los pueblos desplazados.
Este acto no tiene que ver con la seguridad nacional ni con la seguridad pública, sino con el uso del poder estatal para criminalizar a los pobres, los desplazados y los racializados. Las políticas de Trump forman parte de un sistema más amplio de fronteras militarizadas, detención con fines de lucro y propaganda supremacista blanca que castiga a quienes se mueven para sobrevivir.
Estos ataques a los migrantes no pueden separarse de las condiciones que obligan a las personas a huir en primer lugar. Los migrantes deportados a países como Libia, Somalia, Yemen o El Salvador suelen huir de la devastación económica, la inestabilidad política y los conflictos — muchos de los cuales han sido empeorados o causados directamente por la política exterior estadounidense, la agresión militar y las imposiciones económicas neoliberales. Décadas de dependencia de la deuda, acaparamiento de tierras, privatización y desempleo estructural han despojado a millones de personas de sus medios de vida, haciendo que migrar sea una cuestión de supervivencia.
La Alianza Internacional de Migrantes expresa su total solidaridad con todos los migrantes y refugiados enfrentando estas violentas políticas de deportación. Hacemos un llamado a todos los movimientos de base, defensores de derechos humanos y activistas migrantes a resistir la campaña de desplazamiento, deshumanización y aislamiento de Trump. Exigimos la suspensión inmediata de todas las deportaciones a terceros países inseguros, el respeto de las normas jurídicas internacionales y la protección del derecho de todo migrante a organizarse, resistir y vivir con dignidad.
Alianza Internacional de Migrantes
24 de mayo de 2025
